Restauración-Rehabilitación-Reconstrucción
Hace
varios años que empezaron las discusiones sobre el futuro de un
edificio (presuntamente) emblemático de nuestra ciudad. Es de 1932 y su
antigüedad (y estado) podría ser objeto de discusión ad aeternum y
ese es el menor de los males. Ya definitivamente vendido a una conocida
cadena hotelera, el plan consiste en convertirlo en hotel de 5
estrellas pero manteniendo fachada y elementos significativos por
tratarse de un "edificio de especial protección".
Ésta
mañana paseaba por el Casco Viejo y al acercarme a la Plaza de San
Agustín (emplazamiento del edificio) observo a varios viandantes mirando
atentamente la situación de las obras y escucho algún murmullo del
tenor "no parece mucha restauración", "lo ha vaciado del todo", y el
mejor de todos "¿no decián que los terrenos eran inestables?. Pues entre
grúas, andamios y camiones verás como tenemos un disgusto".
Con
mi conocida discrección levanto la vista para hacerme una idea por mi
mismo, obviando lo de la inestabilidad por el perfil del suelo que
impidió anteriores operaciones urbanísticas, y arriba dejo la imagen. No
me queda nada claro, pero en el momento de la instantánea, un operario
estaba golpeando con precisión la espadaña de la derecha, a través de
los vacíos de las ventanas se veía el cielo despejado desde la planta
baja y el impacto visual de apeos y estabilizadores alrededor de lo que
queda del antiguo edificio no es nada tranquilizador para el observador
parcial. A mí ...............
© José Antonio Ferrández
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